Por Mikel Amigot
No es solo una palabra de moda. Blockchain es un verdadero avance tecnológico que transformará las industrias de servicios financieros, médicos, legales y de software.
Esta semana asistí a la conferencia de Finovate 2018 en Nueva York y noté cómo muchos ejecutivos de alto nivel de banca y cadena de suministro prestaban extrema atención.
Por supuesto, las redes basadas en blockchain, las aplicaciones descentralizadas y los libros de contabilidad distribuidos están cambiando silenciosamente el mundo. Cuando el concepto fue introducido en 2008 por Satoshi Nakamoto, una persona desconocida o personas que más tarde desarrollaron la moneda digital bitcoin, nadie predijo esta próxima revolución.
¿Por qué es esto tan relevante?
Un blockchain es una base de datos segura y distribuida, que mantiene una lista creciente de registros ordenados y encriptados, llamados bloques. Cada bloque tiene un enlace a un bloque anterior, una marca de tiempo (la fecha y la hora en que se creó el registro) y el historial de cada archivo. Los usuarios solo pueden editar las partes de los bloques cifrados que “poseen”, ya que poseen las claves privadas creadas criptográficamente necesarias para escribir en ellas (obviamente, estas claves privadas, que son unas pocas líneas de datos, pueden ser robadas; pero también pueden ser asegurados casi sin costo).
Además de este libro de contabilidad inmutable que mantiene la red, un blockchain tiene otro componente principal: una red de igual a igual, descentralizada, administrada de forma autónoma. Esto hace que blockchain sea excelente para registrar cada transacción digital, intercambio de bienes y servicios, registros médicos, contratos, votaciones electorales, gestión de identidades y datos privados. Naturalmente, abre la posibilidad de desintermediación masiva de transacciones y procesamiento de transacciones, eliminando a cualquier “intermediario”. Además, la utilidad de blockchain se extiende al almacenamiento de cualquier tipo de información digital, incluido el software.
En otras palabras, es una nueva Internet de valor, una tecnología transformadora de la segunda era digital.
Mikel Amigot es el fundador de IBL News y IBL Education (Open edX)
